Por las intensas lluvias que soportó Brasil en las últimas semanas se incrementó en forma notable el caudal del río Iguazú, dejando una postal poco habitual para las cataratas que en los últimos días han llegado a un pico máximo de altura de 14,2 metros con un paso de 6.270 metros cúbicos de agua por segundo.

Para tomar magnitud de lo que representan estos datos vale remarcar que es cuatro veces más que lo normal, que va entre 1.500 y 1.800 aproximadamente. Este ritmo irá mermando lentamente en los próximos días manteniendo un tramo central de las pasarelas sin habilitar ya que el agua golpea sobre las mismas casi al límite del paseo.