El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, defendió hoy el operativo que la Policía de la Ciudad desplegó ayer en los alrededores de la Plaza de Mayo, durante el velatorio de Diego Armando Maradona, al afirmar que el límite de su gestión es “la violencia”. No se explayó más. Justificó la violencia institucional ejercida para detener la agresión de los barras que se acercaron al velorio de Maradona. Lo cierto es que fue la Policía de la Ciudad la que en forma violenta le puso un límite a la extensión de la hilera de personas que pacientemente esperaban por su turno hasta ingresar a la Casa Rosada. Según afirmó posteriormente Diego Santilli (responsable de la seguridad en la ciudad) es corte se hizo siguiendo una orden emanada del Ministerio de Seguridad de la Nación (aclaró que no fue la ministra Frederic la que se comunicó).

Sobre los incidentes Larreta apeló a denunciar una maniobra política al referirse a las críticas a la policía porteña y lamentó que en “un día tan triste para los argentinos hayan politizado la situación. Siempre colaboramos con la Policía de la Ciudad cuando el Gobierno nacional nos convoca a un comando unificado de seguridad como el de ayer y vamos a seguir colaborando”.