La legislatura porteña aprobó este jueves en sesión ordinaria y en primera lectura, un proyecto que impulsa el Jefe de Gobierno Horacio Rodríguez Larreta, en sociedad con la constructora IRSA, que autoriza la construcción de torres en Costanera Sur suprimiendo espacios verdes de la ciudad. Tras una extensa sesión los 37 votos del oficialismo se alinearon y permitieron la continuidad del proyecto a la espera de una próxima audiencia pública, que no tiene peso para modificar la votación, y un segundo tratamiento en el Palacio Ayerza para su aprobación definitiva.

El negocio inmobiliario es presentado como un “parque público y urbanización Costa Urbana”. Se trata de una propuesta para cambios de zonificación en predios de la Costanera Sur. Es un proyecto de características comerciales similar al de Costa Salguero, fuertemente repudiando en la audiencia pública por más de 2 mil vecinos, y tiene pendiente su aprobación en segunda lectura. La mayoría absoluta que tiene el oficialismo le permitirá aprobarlo sin importar el repudio de organizaciones de profesionales, ONG y vecinos que pacientemente se manifestaron durante semanas en la audiencia con una convocatoria nunca antes alcanzada con semejante número de participantes.

La empresa IRSA posee 72 hectáreas en la región de la Costanera Sur donde iba a funcionar la Ciudad Deportiva de Boca. Ahí prevé el relleno de los terrenos y la construcción de edificios de lujo hasta 45 pisos, es decir 145 metros de altura. Serán 6 mil unidades, más shopping y un hotel, ubicadas al lado de la Reserva Ecológica y del barrio popular Rodrigo Bueno.

En la actualidad, esos terrenos solo pueden ser utilizados con fines deportivos, por lo cual el acuerdo alcanzado por la administración porteña amplía los usos y habilita la posibilidad de construir torres. Los terrenos conocidos como ex Ciudad Deportiva fueron propiedad del Estado nacional hasta que en la década de 1960 fueron donados al club Boca Juniors, a fin de que allí se construya un estadio y canchas auxiliares, y con la prohibición de que luego fuera vendido a privados.

El pasado 19 de julio entre el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires y la empresa, que adquirió el predio en 1997, firmaron un convenio para ampliar los permisos a fin de habilitar la construcción de edificios.