Las fiestas privadas con invitación abierta han tenido un lamentable final en no pocas ocasiones recientes. Sin controles se han transformado en tristes noticias policiales. La municipalidad de Florencio Varela realizó días pasados un operativo en una fiesta que estaba desarrollándose en una quinta del barrio Villla Vatteone.

Según comunicó el municipio el evento organizado por menores, no contaba con ningún tipo de medidas de seguridad ni habilitación municipal. Por tal motivo, los inspectores actuantes labraron las actas correspondientes y procedieron a la clausura preventiva del lugar. En la misma jornada la Subsecretaria de Inspección General clausuró un local en el barrio Centro y una fiesta que tenía lugar en la calle Progreso. En el primer caso, los inspectores se dirigieron a la calle Rivadavia junto a efectivos del Comando de Patrullas, personal de Defensa Civil y Guardia Comunal, donde se constató la presencia de menores. Por lo expuesto, se labraron las actas correspondientes y se instó al cierre del bar, por infracción al artículo 9 de la ley 14050.